Tras una gran segunda fase, el equipo rojiamarillo, que entró en el cuarto lugar y casi de rebote, alcanzó el título del torneo Apertura 2024. Los florenses cayeron 1'2 en el juego de vuelta, pero les valió el triunfo de 2 a 0 en casa el fin de semana para volver a meter una daga en Alajuelense, que suma un torneo más sin la corona nacional. El sueño liguista de la remontada se incrementó con los dos goles, que le permitieron empatar la serie, pero murió con el tanto de Allan Cruz, el MVP de la fase final. Cruz metió seis goles entre la semifinal, la final de segunda fase y la gran final. Como en el 2019, Herediano silenció el Morera Soto, ahora para alcanzar su título 30 y empatar a la Liga en la historia de los cetros del fútbol nacional. Con 15 minutos de retraso, una salida poco protocolaria y un ambiente espectacular, con juegos de pólvora, el escenario para la Liga fue el mejor. Apenas en 50 segundos el réferi Keylor Herrera señaló penal por una falta de Elías Aguilar sobre Celso Borges. El VAR lo ratificó al no intervenir y el propio Celso se encargó de poner el 1'0 al 4’. Con eso, se ponía a un gol de empatar la serie. El ímpetu liguista lo puso de cara a gol nuevamente al 11’, en una llegada de Jonathan Moya al área y un remate cruzado que se fue desviado. Poco a poco los florenses empezaron a tomar control de las acciones, a bajarle el ritmo al partido y asustó con un tiro libre de Elías Aguilar, que se fue besando el poste. Arrancando el segundo tiempo el Morera Soto explotó con el segundo tanto manudo, con el que empataba la serie. Iban dos minutos de la reanudación y otra vez apareció Celso en el área. Esta vez el capitán manudo sacó un centro atrás donde apareció Diego Campos y rematar de seguido y pegado al palo para mandar la pelota a besar las redes; 2'0 y 2'2 en el global. Con eso el partido fue distinto; Herediano decidió adelantar un poco las líneas y se generaron más ocasiones. Sin embargo, otra vez lo silenciaron. Apareció la gran figura de la segunda fase, Allan Cruz con un remate desde la media luna del área para superar la estirada de Leonel Moreira, poner el 2'1 al 69’ y retomar la ventaja en el global. Con ese escenario, otra vez el tiempo se convirtió en un aliado rojiamarillo y en el peor enemigo liguista. Llegó el final y Alajuelense vio como Herediano celebró en su cancha, lo empató en títulos y lo hizo fracasar en el torneo costarricense.